Cada poco se anuncia que aparecerá una película nueva basada en un videojuego de moda o en alguna leyenda de este medio, sin embargo, pasan los meses y las noticias sobre estos anuncios se desdibujan hasta perderse, ¿es quizá así mejor?
En los últimos dos años con la proliferación de videojuegos casi cinematográficos con historias tan sólidas que parecen directamente extraídas de Hollywood, se ha puesto de moda anunciar que estas franquicias darán el salto a la gran pantalla. Muchas veces se dice el nombre del productor y todo (que en muchas ocasiones es el omnipresente Avi Arad, por eso quizá no se materializan), del director, de quién está escribiendo el guión y raras veces, algún actor que participará en lo que tiene muchas papeletas para convertirse en la peor película del año. No nos engañemos, películas buenas sobre videojuegos hay muy pocas.
Estos últimos años hemos seguido la no-evolución y medio-culebrón de la versión de Uncharted (con protagonista anunciado y rechazado e historia que rallaba la estupidez); también hemos estado atentos a los derechos de Assassin"s Creed comprados por Sony que al parecer finalmente producirá y protagonizará Michael Fassbender -por ahora-, a los pasos de Dead Space que sigue adelante con D.J. Caruso como director, y de otros juegos como Heavy Rain, Deus Ex, Need for Speed -que tiene fecha para 2014-... ¿Se convertirán realmente en películas o estas intenciones se las irá llevando el viento como suele suceder?
Una de las últimas que prometió su salto al cine y lo consiguió fue Prince of Persia: las arenas del tiempo, aunque lo hiciera con más pena que gloria. Debutó en 2010 con Jake Gyllenhaal, Gemma Arterton y Ben Kingsley como protagonistas de una versión tediosa aunque respetuosa con el imaginario del juego, que sin embargo, no creó expectación para segundas partes.
Los últimos: Solid Snake y Sam Fisher
Las últimas noticias acerca de franquicias de videojuegos que visitarán las grandes pantallas son las historias de Solid Snake y Sam Fisher, de los videojuegos Metal Gear Solid y Splinter Cell. Ambos proyectos parecen tener buena dirección, con Hideo Kojima involucrado en la aventura hollywoodiense y buscando una cara desconocida para su héroe (si Kurt Russell estuviera en sus años mozos podríamos tener de vuelta a Snake Plissken). En cuanto al filme basado en el agente Sam Fisher, al parecer Tom Hardy (Bane en El Caballero oscuro: la leyenda renace) será el encargado de ponerse en su piel.
Resident Evil, máximo exponente
Si hay una franquicia de videojuegos que ha sabido adaptarse y triunfar en el cine, esa ha sido Resident Evil, que va ya por su quinta entrega (Resident Evil: Venganza). Su éxito, mezcla de acción desmedida y asegurarse a Mila Jovovich, le ha permitido llevar diez años ofreciendo secuelas.
No hay comentarios:
Publicar un comentario