Había una vez una productora de animación que entregaba solo obras maestras. Una empresa que revolucionó el mundo del cine creando el primer filme realizado exclusivamente por ordenador, Toy Story (1995), y encadenando cuatro peliculones consecutivos: Ratatouille (2007), Wall-E(2008), Up (2009) y Toy Story 3 (2010). Una productora que incluso consiguió dos veces ser nominada al Oscar a la mejor película con filmes de ‘dibujos’ y que hizo que cada uno de sus estrenos fuera esperado como un acontecimiento cinematográfico. Su nombre: Pixar.
La mítica empresa consiguió un nombre privilegiado dentro de la industria cinematográfica. Era sinónimo de calidad. No sólo los niños quería ver las películas, sino que los padres tenían más ganas que sus hijos.
Pero algo ha cambiado en Pixar. La calidad dejó de ser el requisito fundamental. Con su adquisición por parte de Disney empezó a desarrollar una pasión enfermiza por las secuelas de sus propias películas. Algunas de un nivel extraordinario, como la tercera parte de la saga de los juguetes parlantes, pero las otras solo destinadas a vender muñecos y hacer dinero, como Cars 2 y Monstruos University.
Dos filmes prescindibles que empañaron el buen nombre ganado. A pesar de que la prensa comenzó a cuestionar estas decisiones más empresariales que artísticas, los chicos de Pixar siguieron a lo suyo y anunciaron una nueva secuela de Buscando a Nemo para 2016. Mientras, continuarían produciendo títulos propios y originales con los que sorprender al público.
Algo pasó en Pixar. Su película para 2014, The good Dinosaur (Con el nombre de Dinosapiens en español), fue retrasada a noviembre de 2015 con la intención de perfeccionar el resultado final. Se daba un fenómeno hasta ahora inédito. Desde 2006 la empresa no ha faltado nunca a su cita anualcon sus seguidores. El estreno de “lo nuevo de Pixar” está marcado en la agenda de cualquier cinéfilo, pero este año han tenido que borrar la cita de la agenda.
Además de pulir el filme también hicieron criba en el equipo, ya que Bob Peterson fue despedido como director del proyecto dejando a Peter Sohn al frente del mismo. Pixar se cargaba al co-director de uno de sus títulos emblema: Up.
El filme se presentó como una odisea que narraba un mundo alternativo en el que el meteorito que acabó con los dinosaurios nunca había colisionado con la Tierra, por lo que los animales convivirían con los humanos.
Desde el retraso y despido nada se había sabido de The good dinosaur más allá de que su estreno llegará el mismo año que el proyecto más esperado de Pixar, Inside Out. Ahora, el actor John Litgow, quien pone voz al personaje protagonista ha realizado unas declaraciones que evidencian una crisis creativa en la empresa más profunda de lo que parecía.
Fotograma de 'Inside out' (Disney-Pixar)Fotograma de 'Inside out' (Disney-Pixar)
Los retoques que anunciaron desde la empresa se convirtieron finalmente en una reestructuración de la película casi por completo: "Grabé todo el papel de The good dinosaur. Ahora la han desmantelado y reimaginado completamente, y es una historia nueva y fantástica. Así que voy a volver a grabar el mes que viene. Va a ser mejor de lo que pudiera haber imaginado" confirmó Litgow para Collider.
También afirmó que su compañera en el doblaje Frances McDormandtambién tendrá que grabar de nuevo su papel y que continúa en la nueva historia, algo que no se puede decir todavía del resto de un reparto que incluía a Lucas NeffBill HaderNeil Patrick Harris y Judy Greer.
A Pixar se le termina el crédito ganado durante años y habrá que ver si en 2015 vuelve a la senda que marcó. No es la primera vez que un filme de la productora se enfrenta a reestructuraciones de última hora. Ratatouille, uno de sus mejores títulos fue mejorada en una maniobra similar. La esperanza es lo último que se pierde.