El realizador japonés, Hayao Miyazaki (El increíble castillo vagabundo, 2004; Se levanta el viento, 2013), recibió el Oscar honorífico, por parte de la Academia de Artes y Ciencias Cinematográficas de Hollywood en una ceremonia realizada el sábado 8 de noviembre, debido a sus contribuciones artísticas en la industria del cine.
Miyazaki, de 73 años de edad, es el segundo realizador japonés en recibir un Oscar honorífico, después de que la trayectoria de Akira Kurosawa fuera reconocida en 1990. También, es la segunda estatuilla dorada que obtiene Miyazaki en su carrera; en 2003 ganó el Oscar en la categoría de Mejor Película de Animación por El viaje de Chihiro (2001).
El evento, donde fue recibido con una ovación de pie, significó la primera vez que Miyazaki asiste a una ceremonia de premios Oscar.
John Lasseter, director creativo de Walt Disney y Pixar Animation Studios, presentó el Oscar a Miyazaki. En su discurso en honor al director japonés, el creador de Toy Story se refirió a Walt Disney y Hayao Miyazaki como los dos principales contribuyentes al cine de la animación:
Hayao Miyazaki ya es, para siempre, una de las grandes influencias del cine de animación, inspirando a generaciones de artistas a trabajar en nuestro medio iluminando su potencial ilimitado. En la variedad y la calidad del cuerpo de su obra, nunca habrá otro para rivalizar con él.
Después de recibir el premio, Miyazaki, con una tímida sonrisa, manifestó:
Mi esposa me ha dicho que yo soy un hombre muy afortunado.
El artista japonés señaló que los años pacíficos de la posguerra en Japón le dieron un ambiente de tranquilidad para crear sus obras maestras de la animación.
Nuestro país no ha peleado en una guerra durante los últimos cincuenta años (mientras yo estaba trabajando). Esto nos permitió trabajar más duro […]. Tuve mucha suerte de ver la última vez en que se hacían filmes de animación con papel, lápiz y rollos de película.
En una entrevista con el diario Los Angeles Times, Miyazaki mencionó que actualmente trabaja en varios proyectos; el diseño de un área lúdica y de juegos para los niños en Fukushima, sitio donde se originó una crisis nuclear en 2011, así como la escritura y realización de un manga sobre un samurai del siglo XVI. Aunque hace algunos meses, Miyazaki anunció su retiro del cine, en otra entrevista, con The Associated Press, Miyazaki declaró su intención de seguir trabajando, no en la dirección de largometrajes, pero sí en cortos animados que puedan ser presentados y exhibidos en el Museo del Estudio Ghibli: “Seguiré trabajando en el área de animación hasta que me muera”, concluyó el director.
En esta gala íntima, celebrada en la sala Ray Dolby del Hollywood & Highland Center, también recibieron el Óscar honorífico el actor y activista Harry Belafonte, el guionista francés Jean-Claude Carrière y la actriz irlandesa Maureen O'Hara. “Estos premios nos permiten reflexionar no sobre las películas de este año, sino sobre los logros de una vida entera”, aseguró Cheryl Boone Isaacs, presidenta de la Academia.
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