La Federación Iberoamericana de Productores Cinematográficos y Audiovisuales (FIPCA) realizó una presentación especial en San Sebastián, donde además de sintetizar el panorama actual de tres cinematografías de la región, anunció algunas acciones que buscan emprender para atender problemáticas en común, como el pago del Virtual Print Fee (VPF) y la urgencia por modificar el actual acuerdo de coproducción.
"La idea es trabajar políticamente desde FIPCA. Buscar que desde la CACI haya una proclama sobre el VPF y ver que en cada país se le encuentre una solución, ya que no todas las soluciones son iguales. Ojalá todos pudiéramos arribar a la solución uruguaya", comenta a LatAm cinema el productor argentino Ignacio Rey.
El reciente acuerdo alcanzado entre las principales compañías exhibidoras uruguayas y los Ministerios de Cultura e Industria del país, por medio del cual las películas nacionales no deberán pagar VPF, recrudeció el debate en torno al impuesto que se impone por cada copia de exhibición, a fin de remodelar las salas en el forzado paso al digital. Pero las propias características de ese mercado, unidas a una decisión política, hacen posible esa realidad que difícilmente podría ser replicada en otras cinematografías.
Justamente, FIPCA propone buscar soluciones puntuales para cada cinematografía, entendiendo las diferencias que existen en la región y las dimensiones de las películas.
"Una película como "Relatos salvajes" tiene un costo enorme de VPF porque ocupa 280 pantallas. Pero estás jugando en otra liga. Si yo tengo una película que hubiera salido con 35 o 40 copias en otro tiempo, hoy, considerando que cuesta 800 dólares cada pantalla, que luego se replican si se cambia de pantalla y terminas asumiendo el costo de muchas más copias, entonces hay que empezar a disminuir la cantidad de copias de estreno y se mata a la película desde ese lugar", ejemplifica Rey.
Por ello, los esfuerzos están concentrados en "buscar soluciones que impacten especialmente en las películas de menor capacidad de lanzamiento y distribución".
Otro de los puntos en los cuales trabaja fuertemente la asociación es en adecuar a las necesidades de la industria los convenios de coproducción. "Queremos buscar caminos para la reformulación del convenio iberoamericano de coproducción. Evitar todas aquellas trabas que impiden que una película tenga nacionalidad, por ejemplo, solo si la participación es financiera; tratar de que la participación artística no tenga los mismos condicionantes que tiene hasta ahora, que obliga a contar con actores extranjeros y forzar el guión", cuenta el productor chileno Adrián Solar, presidente de FIPCA.
Actualmente, entre sus prioridades se cuentan fortalecer sus lazos con la Conferencia de Autoridades Cinematográficas de Iberoamérica (CACI), como así también con la Entidad de Gestión de Derechos de los Productores Audiovisuales (EGEDA), y afianzar los Premios Platino creados en este año
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