Entrevista al director del documental “La torre de los sueños”

Escrito por Fundación Cinemateca Nacional

Orlando D'Elia: “Pienso que el único fin de las familias que se encontraban ocupando la torre de David era el de encontrar una vivienda”

El director del documental “La torre de los sueños” estuvo de visita en la Fundación Cinemateca Nacional para conversar acerca de su más reciente producción, que será proyectada próximamente en nuestro acostumbrado espacio Estrenar el Cine Nacional.

Orlando D’Elia es un realizador audiovisual nacido en 1955, cuyo trabajo por muchos años se enfocó en la fotografía, iniciando su labor en 1978. Después de cursar la carrera de Biología en la Universidad Central de Venezuela entre 1979 y 1986, se desempeñó como fotógrafo en el Laboratorio de Microscopia Electrónica y el Departamento de Fotografía de la Escuela de Biología de esta misma institución.

A partir de entonces, D’Elia trabajó como Jefe del Departamento de Fotografía de la Universidad Nacional Abierta (UNA) (1984-1989) y la Fundación Museo de Bellas Artes (1989-1996). Asimismo, laboró como fotógrafo contratista en las empresas nacionales PDVSA (1998-2013) y CANTV (2007-2013). Los trabajos cinematográficos de D’Elia son los documentales Las garzas del Guaire (1985) y La torre de los sueños (2014).

Con “La Torre de los sueños” D'Elia nos presenta un documental sobre el rascacielos inconcluso conocido como “Torre de David”, ubicado en pleno corazón de Caracas. Dejado a medio construir y finalmente abandonado por sus autores originales a causa de la crisis bancaria de mediados de los años 90 del siglo pasado este imponente edificio pasó de ser un monumento del cataclismo económico que azotó el país, al singular hábitat de un sinnúmero de personas quienes en 2001 comenzaron poco a poco a habitar varios de los pisos de la edificación y a acondicionarla hasta convertirla en una urbe dentro de otra urbe .

Es así como esta obra retrata el día a día de estos hombres y mujeres que crearon sus hogares dentro de esta construcción. Durante 20 minutos, los espectadores son testigos de la interacción entre los “torrences” como se autodenominan los habitantes de este espacio, los parámetros sociales, culturales y productivos en los que se fundamenta su comunidad, y los eventos significativos en sus existencias individuales; hasta el momento en que debieron abandonar la torre el pasado año para ser alojados en nuevas y dignas viviendas, dentro de las políticas que adelanta la Comisión Presidencial para la Transformación de la Gran Caracas.

Con mucha amabilidad el director compartió diferentes anécdotas y nos respondió algunas preguntas.

¿Cómo fue el proceso de producción del documental?

Este documental nació originalmente con la idea de hacer un registro fotográfico, y en el camino me planteé realizar un documental que se llevó a cabo en un tiempo relativamente rápido, alrededor de unos 15 o 20 días. Este trabajo se basa en entrevistas testimoniales, en particular de 17 habitantes de la Torre de David, de familias que de alguna manera están ligadas a una actividad productiva en el marco de las políticas del Estado, que se basan en el derecho que tiene toda persona de acceder a una vivienda digna

¿ Por qué la Torre de los sueños?. ¿Cuál es el mensaje que desea transmitir al público?

El título lo escogí preguntándome si esa era una torre de Babel, o torre de los sueños. Porque durante el tiempo que estuvieron ocupando esa edificación se tejieron muchas opiniones, en su mayoría negativas y de esa premisa nació el título, que intenta reflejar la necesidad de esas personas de tener una vida digna y de ser considerados en las políticas del Estado.

¿Cómo fue la experiencia con los habitantes de la torre durante el rodaje?

Cuando me encontraba realizando las primeras fotografías la torre estaba siendo intervenida por el Estado para reubicar a las familias. La torre para mi era lo más seguro porque sus habitantes estaban muy bien organizados, ellos introdujeron un cambio en la nueva constitución de la República para ser considerados ocupantes, más no invasores. Personalmente, los defino como ocupantes de un espacio que incluso pasó a ser del Estado después de la problemática bancaria en el año 1994.

El documental comienza con el testimonio: “Ese mismo pensar de que todos tenemos derechos iguales como venezolanos nos hizo ocupar la Torre de David”. ¿Qué nos puede comentar al respecto?

Pienso que el fin único de las familias que se encontraban ocupando la torre era el de encontrar una vivienda. Se trata de personas como nosotros, viviendo en condiciones no adecuadas. Personas trabajadoras muchos de ellos profesionales, con metas y sueños, como cualquier población del país. Finalmente lo que deseo lograr con este documental es en primer lugar, deslastrar la palabra invasores por ocupantes, en una postura constitucional del derecho que tenemos todos a obtener una vivienda. Y en segundo lugar, reivindicar el proceso que realiza el Estado venezolano para otorgar viviendas dignas a los venezolanos. Sin duda, esas familias que se encontraban en la torre tenían muchas historias que contar.

Invitamos a toda la audiencia Cinemateca a disfrutar y reflexionar a través, de este documental que nos presenta una realidad distinta a lo que comúnmente conocemos acerca de “La Torre de David”